“Hace una década, ni siquiera conocíamos el fentanilo y ahora es una crisis nacional”, sostuvo un fiscal.
Las incautaciones de fentanilo, un opioide sintético que es hasta 50 veces más fuerte que la heroína y 100 veces más fuerte que la morfina, en la frontera de EE.UU. con México siguieron aumentando en 2022.
“Hace una década, ni siquiera conocíamos el fentanilo y ahora es una crisis nacional”, sostuvo el fiscal Randy Grossman citado por New York Post. “La cantidad de fentanilo que estamos incautando en la frontera es asombrosa”, añadió.
Los afirmaciones de Grossman tienen lugar en el contexto de las grandes incautaciones de este poderoso analgésico sintético desarrollado en la década de 1960.
Más de 1.200.000 pastillas de fentanilo, así como casi dos kilogramos de polvo y 17 kilogramos de metanfetamina fueron decomisados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. (CBP, por sus siglas en inglés), informó el 29 de diciembre el director del puerto de entrada de Nogales, Michael Humphries.
Anteriormente, en la misma zona se habían incautado 1,5 millones de pastillas de fentanilo en una semana, según anunció Humphries, a principios de este mes.
Además, sostuvo que las píldoras se ocultaron de distintas formas para cruzar la frontera, como en tanques de gasolina, pisos, puertas y paneles de vehículos.
La Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) de EE.UU. ha decomisado este año una cantidad de fentanilo suficiente como para matar a toda la nación.